Un Instante con…Mar Balmón

Mar Balmón, es una maestra sombrerera y formadora en técnicas de sombrerería de alta costura pero no siempre ha sido así… Es filóloga por vocación y “sombrerera” por pasión. Desde pequeña se ha sentido atraída por las espectaculares piezas de arte que a lo largo de la historia han ornado las cabezas de ilustres personajes y gente del pueblo. ¿Quieres conocerla más? Acompáñanos en nuestra entrevista. Muchas gracias por tu tiempo Mar. 

1.Mar, te defines como, maestra sombrerera y formadora en técnicas de sombrerería de alta costura. ¿Cuándo y cómo empezó todo?  

Pues empezó en el momento en que yo me encontraba en una situación laboral que no me gustaba en absoluto. Necesitaba ocupar mi mente con algo que me llenara lo suficiente como para no estar todo el día pensando en la situación que tenía. Esto fue hará unos cinco años.

Busqué en internet cosas que pudieran llenar ese espacio y aún no se cómo me topé con el mundo de la sombrerería. Y me dije: ¿porqué no? Esto seguro que me gusta y decidí hacer mi primer curso en Madrid.

Con lo que aprendí decidí empezar a investigar por mi cuenta, algo que me encanta, siempre estoy investigando, y fui dando mi propio toque a las técnicas para conseguir realizar piezas imposibles que yo tenía en la cabeza. Fue entonces cuando me enteré de un concurso internacional de sombrerería y decidí presentarme para que se fuera oyendo mi nombre y ver qué tipo de trabajos realizaban otros sombrereros con experiencia. Gané el concurso y ahí empezó todo.

2.Sabemos que eres filóloga, ¿cambiaste las letras por los sombreros? ¿Por qué?

Aunque estudié filología inglesa, por motivos personales, tuve que dejarlo en el último año y nunca he obtenido el título. Aunque no he ejercido como filóloga, esa carrera ha sido lo que me ha proporcionado un trabajo que disfrutaba cada día hasta que esa situación dejó de ser satisfactoria. Entonces decidí cambiar aquello que no me gustaba por un sueño: ser feliz haciendo lo que yo quería.

3.¿Qué paso cuando le dijiste a la familia, en vez de: Mamá quiero ser artista, en tu caso fue…Mamá quiero ser sombrerera?

Pues imagínate sus caras, un poema. Mientras unos me apoyaban otros preguntaban: ¿por qué sombreros si eso no se usa?, ¿quién compra sombreros?, Pero… ¿eso da dinero? Había preguntas y afirmaciones para todos los gustos. Pero yo tenía clara una cosa, y es que iba a luchar por lo que yo quería, me daba igual tardar dos días o dos vidas, no iba a parar hasta conseguirlo. Y creo que, si tú misma te convences de que eres capaz, tienes la mitad del camino hecho.

4.¿Qué es lo que más te atrae del mundo de los tocados o sombreros? ¿A quién admiras?

La creatividad sin duda. Aunque a la hora de vender un sombrero o tocado la gente es muy conservadora, pero todos quieren probarse esa pieza espectacularmente loca.

Como referentes mundiales admiro a Philip Treacy por su capacidad creativa y esa elegancia innata que aplica en todo lo que toca. Y por supuesto, a Anya Caliendo, con quien estudié, y que tiene una técnica perfecta para confeccionar cualquier pieza y darle un acabado de alta costura que pocos son capaces de conseguir. En el panorama nacional me encanta Tolentino porque rompe todas las reglas y se atreve con cualquier cosa.

5.¿En qué o en quién te inspiras a la hora de crearlos?

Pues la inspiración está en cualquier parte, igual puede ser una canción que una conversación con una amiga, un paseo por el parque o un simple dulce.

6.¿Puedes explicarnos cómo es el proceso de creación de un tocado o sombrero? 

En mi caso el proceso de creación es algo complicado porque no me limito a hacer piezas sencillas, eso ya lo hace todo el mundo, mi trabajo se caracteriza por diseños estudiados, muy estructurados y siempre estoy buscando materiales alternativos, cosas que no utilicen los demás para conseguir acabados que llamen la atención.

El proceso creativo es el que más tiempo lleva: conseguir la idea perfecta. Después viene el proceso técnico: los pasos que hay que seguir para materializar la pieza que has diseñado. Y finalmente viene la producción que, dependiendo de la pieza, puede llevar desde una semana a tres meses.

En otras ocasiones he trabajado con un diseño del propio cliente al que hacemos los cambios necesarios para que su materialización sea viable.

7.¿Crees que la alta costura en sombreros y tocados ha evolucionado? ¿Si es que sí, en qué aspectos?

Tanto los sombreros como los tocados han sufrido una evolución a lo largo de la historia, desde los antiguos egipcios hasta los años 60 cuando comenzó su declive.

Si te fijas en los tocados que se comercializan hoy en día te darás cuenta de que son una reinterpretación de los que se utilizaban antiguamente pero con materiales modernos.

Por ejemplo ahora están muy de moda las coronas metálicas para novias que no dejan de ser una reinvención de las coronas del medievo o del Renacimiento pero con formas más actuales y combinando materiales novedosos.

Al final todo vuelve de una forma u otra.

8.Has ganado el primer premio en un Concurso Internacional de Sombrería de Alta Costura, ¿qué ha supuesto recibir este premio para ti?

Pues te puedo decir que ha marcado un antes y un después en mi vida profesional. Esto supuso la oportunidad de dejar atrás mi vida como secretaria y comenzar de nuevo en un sector apasionante.

Este premio me dio la seguridad y la decisión suficiente como para ir a por mi sueño, agarrarlo con las manos y cumplirlo. Me hizo creer en mí.

9.¿Cómo fue la experiencia de ir a Nueva York para seguir formándote con Anya Caliendo?

Fue maravillosa, con Anya no solo aprendí las técnicas de sombrerería y el arte de la alta costura sino que también aprendí a tener un objetivo, a confiar en mí misma lo suficiente como para no dejarme influir por nadie a la hora de crear mis diseños. Fue una experiencia personal y profesional que guardo con especial cariño en mi corazón.

10.Ahora eres la responsable del Taller de Sombrerería en Sastrería Cornejo y creas piezas para teatro, cine y televisión. ¿Tienes libertad absoluta o tienes que ceñirte a los diseños?

Pues eso depende mucho del figurinista que esté realizando el proyecto. Lo habitual es que ellos traigan los diseños preconcebidos y yo debo ceñirme a ese modelo. Pero no siempre es así, hay otros que me indican una idea general, colores a utilizar y época en la que nos movemos y me dan absoluta libertad para trabajar.

11.¿Tienes alguna anécdota o curiosidad acerca de tu trabajo, que puedas compartir con nosotros?

Nunca hay que dar nada por sentado. Yo creía que todo el mundo tenía claro como debía colocarse un tocado, máxime cuando éste tiene una diadema o una goma elástica que te indica la posición, además la forma del tocado junto a esa forma de sujeción te suele dar una pista de como debes ponerlo. Sin embargo, me ha ocurrido en alguna pasarela en la que no he podido estar en el momento de la inauguración que las modelos se han puesto el tocado de una forma tan difícil que yo jamás hubiera imaginado. Sobre todo porque la diadema tiene una posición concreta, y no he podido comprender como han podido sujetárselo a la cabeza si se lo han puesto completamente al revés. Eso me ha hecho admirar mucho más el trabajo de estas chicas que aguantan estoicas en una pasarela con una pieza de gran tamaño sobre la cabeza colocada al reves, lo que supone que el peso obligue al tocado a caerse y ellas siempre salen airosas. Supongo que son los nervios del monmento.

12.Acabas de presentar tu primera colección de alta costura: Mata Hari, que por cierto, ¡nos encanta!. ¿Por qué este nombre y a qué tipo de mujer va destinada?

Decidí inspirarme en Mata Hari porque representa al tipo de mujer que yo quería plasmar en la colección: una mujer libre, independiente, que decide vivir su vida como ella quiere, librándose de etiquetas, tópicos o clichés establecidos.

La mujer de hoy en día ha evolucionado mucho con respecto a las generaciones anteriores y espero que así siga siendo, aún queda mucho camino por recorrer, cada vez menos, creo que ese tipo de mujer es la que necesita el mundo y a ellas va dirigida la colección: una mujer inteligente, independiente, con ganas de comerse el mundo y sin miedo a vivir, una mujer que sale de su zona de confort para descubrir las cosas divertidas de la vida, en definitiva una Mata Hari moderna.

13.¿Tienes alguna creación estrella? Es decir, cuál de tus creaciones tiene más demanda?

Pues te diría que las coronas y peinas. Es lo que más demandan las novias pero porque han estado muy de moda y al final todo el mundo quiere llevar lo que está de moda.  

14.También hemos visto la colección Tea Party, niñas que conquistan el mundo. Son unos diseños, ¡muy apetecibles! ¿Por qué estos diseños? ¿Realizas trabajos para todas las edades?

Pues llevaba tiempo dándole vueltas al tema de crear una colección infantil porque me iba a permitir un diseño más divertido que la colección para adultos. Un día fui a merendar con mi hija a una pastelería de Madrid con una decoración inspirada en las pastelería parisinas y cuando ví los maravillosos y preciosos dulces que realizaban su presentación, los colores, los acabados que yo ya veía de alta costura, decidí que sería la base de inspiración para mi colección infantil.

Aunque la llamamos infantil verás que tiene diseños muy divertidos que son aptos para todas las edades, porque si un sombrero te gusta ¿porqué no te lo vas a poner? La edad es solo un número.

15.¿Estás de acuerdo con la frase de Philip Treacy: «Llevar sombrero tiene que ver con la confianza que una mujer tiene en sí misma»? ¿Por qué?

Por supuesto. Estoy convencida de que todos hemos oído en alguna ocasión aquello de: “yo no llevo sombrero porque no me quedan bien”, “me siento ridícula si me pongo un tocado”. Casi todas las mujeres son reacias a ponerse algo en la cabeza porque les da vergüenza, saben que todo el mundo las va a mirar y no todas están cómodas con esa situación. En España tenemos ese gran sentido del ridículo que nos hace pensar que si nos miran es porque vamos disfrazadas o ridículas.

Sólo aquellas a las que no les importa el qué dirán, a las que tienen suficiente confianza en sí mismas son las que se atreven a salir a la calle de forma diferente.

16.Hablemos de los cursos que ofreces, ¿cómo son? ¿los impartes todos tu? ¿Quién se puede apuntar al curso? ¿Requieren conocimientos básicos?  

Mis cursos son individuales y personalizados, y siempre los imparto yo misma. Están pensados para que pueda realizarlos cualquier persona a la que le guste crear con sus propias manos.

He diseñado diferentes opciones para cubrir las necesidades de todos los públicos, y si aún así alguien no acaba de encontrar su curso ideal siempre nos queda la opción del Curso Personalizado que se hace a medida de cada alumno.

En algunas ocasiones imparto Masterclass de temas monográficos donde se admiten un máximo de siete alumnos y suelen interesar mucho porque, además de aprender, tienes la opción de conocer a profesionales del sector o simplemente a gente que comparte tus mismos intereses.

Lo mejor de todo es que no es necesario tener conocimientos previos ni saber coser.

17. Para despedir la entrevista, siempre acabamos queriendo saber… ¿Cuál es tu Instante de felicidad?

Pues te diría que tengo muchos porque trabajar en lo que me apasiona me da muy buenos momentos. Pero si tuviera que escoger uno, te diría que ese momento en el que ves tus creaciones en televisión, en una revista o en la cabeza de una clienta que se siente especial con esa pieza, sería ese. Ese momento de reconocimiento del esfuerzo que has realizado para conseguir una pieza única y especial.

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